Desde 1999 la cooperativa lleva adelante un proyecto extensión con la comunidad educativa, cuya propuesta central es acercar a los alumnos de las escuelas medias y superior a la práctica de los conocimientos teóricos que reciben en la escuela.

Luego de las primeras experiencias con dos escuelas en 1999, se fue diseñando un sistema de pasantías que persiste hasta nuestros días y hace que por año cerca de 100 chicos transiten por la cooperativa.

Esta modalidad implica que los alumnos cursan sus pasantías en la sede administrativa donde aprenden sobre su funcionamiento. Además, reciben capacitación en cooperativismo, proyectos ocupacionales y temas vinculados al medio ambiente, haciendo especial hincapié en el recurso hídrico.

Las pasantías se llevan a cabo a partir de convenios con escuelas de la localidad. Los alumnos organizados en 10 o 12 grupos concurren semanalmente cumpliendo 4 horas diarias.

En ese tiempo reciben charlas brindadas por los consejeros sobre las áreas de trabajo de la cooperativa, relevan datos y hacen prácticas contables. El cursado culmina con una visita a la planta potabilizadora La Quebrada.

El objetivo de las pasantías no es sólo educativo sino que también persigue la formación integral en los principios y valores cooperativos, y la adquisición de herramientas válidas para desenvolverse en el ámbito laboral.

Para aprobar las pasantías, los alumnos deberán cumplir con la asistencia y presentar un trabajo final (proyecto) tanto a la cooperativa como a los docentes de la escuela donde asisten.

Estamos orgullosos como entidad de trabajar con y para los jóvenes, agradeciendo a los institutos educativos por la confianza depositada en el proyecto y por el esfuerzo mancomunado para lograr el éxito.

Desde 1999, las pasantías han sido coordinadas por el profesor Juan Delarossa